Bien Pacheco

El viernes 12 de octubre, nos visitó en Ensenada el escritor y poeta José Emilio Pacheco, nos dio una muy amena plática, nos tenia con una carcajada tras otra carcajada, lo que no impidió que la plática tuviera un tono serio la mayor parte del tiempo. Nos leyó material inédito, cuentos y poemas, los intercalaba con graciosos comentarios acerca de lo que había inspirado dichos escritos, incluso llegó a interrumpir alguna lectura para comentar.

Da la impresión de que el hombre dice en voz alta cada pensamiento que tiene, aunque el dice que lo que piensa lo escribe. Hizo gala de todo su conocimiento, es un gran lector y conocedor dice que su biblioteca es un gran (me imagino que es enorme) montón de libros apilados y que cuando busca un libro nunca lo encuentra en ese desorden.

Mientras leía un cuento, encontró dos errores dice que es un trabajo que nunca termina siempre hay errores que corregir. Habló de los escritores que quieren que les publiquen sus primeros 5 poemas, y comparó la carrera de un escritor con la de un concertista de piano, que comienza su formación desde los 6 años de edad, practicando 8 horas diarias y aún así presenta su primer concierto a los 12 ó 14 años frente a algunos miembros de su familia.

Dice que ya nadie hace reseñas de libros que valgan la pena, ahora solo escriben cosas como: "Un libro impresionante y fácil de leer", en lugar de hacer una reseña completa de varias páginas.

El señor es muy bromista, pero hace ese tipo de broma culta; bromas que no cualquiera entiende, aunque tampoco sin exagerar. Terminó con una firma de libros, a la que asistí con Eva, a la que le chuleó el nombre, por corto y bonito, antes de firmar su ejemplar. Lo escuche decir que había asistido mucha gente, que ni siquiera en México se ve eso. Le dimos las gracias y nos fuimos.